Todos los padres lo saben: tu alegre bebé se convierte de repente en un pequeño llorón, baboso y mordedor. «Serán los dientes», se suele decir. Pero, ¿es cierto? ¿Y es posible que un bebé tenga fiebre por la dentición? ¿Qué es verdad y qué es un mito persistente? Hemos recopilado para ti los hechos y mitos sobre la dentición. Así sabrás qué puedes esperar realmente cuando a tu bebé le salgan los primeros dientes.
¿Cuándo salen los primeros dientes?
La mayoría de los bebés tienen sus primeros dientes entre los 4 y los 8 meses, pero pueden salir antes o después. Algunos bebés incluso nacen con un diente, y otros tienen que esperar hasta después de su primer cumpleaños. Todo es normal, siempre y cuando el desarrollo se produzca finalmente.
¿Tu hijo va según lo previsto? ¿Existe realmente algo así como «lo previsto»? Puedes leer más al respecto en nuestro blog: Paso a paso: ¿cuándo le salen los primeros dientes a tu bebé?
¿Mito o realidad?
8 afirmaciones sobre la dentición bajo la lupa
1. "La dentición provoca fiebre."
MITO - con algunas matizaciones
Puede producirse un ligero aumento de la temperatura (hasta unos 38 °C) debido a la inflamación de las encías, pero la fiebre real (por encima de 38 °C) suele indicar otra causa, como una infección viral. La dentición no provoca fiebre alta ni erupciones en el pecho.
En caso de duda, confía en tu instinto maternal. Consulta a tu médico si no te sientes segura.
2. "Los bebés muerden y mordisquean más cuando les salen los dientes."
REALIDAD
La presión que ejercen los dientes sobre las encías provoca molestias. Al morder o mordisquear objetos duros (¡o tus dedos!), tu bebé busca alivio. Por lo tanto, este comportamiento es totalmente normal.
Dale a tu bebé un mordedor sacado de la nevera (¡no del congelador!) para aliviarle las encías.
3. "Todos los bebés tienen los mismos síntomas cuando les salen los dientes."
MITO
Algunos bebés apenas notan nada cuando les salen los dientes, mientras que otros lo pasan realmente mal: lloran, duermen mal, comen menos... Por lo tanto, no existe un proceso universal para la dentición. Cada niño lo experimenta de forma diferente
4. "La dentición puede causar diarrea."
MITO
No hay pruebas científicas de que la dentición en sí misma provoque diarrea. Lo que sí puede ocurrir es que el bebé se meta todo en la boca, lo que aumenta la probabilidad de que se desarrollen bacterias (y, por lo tanto, de que las deposiciones sean más líquidas). ¿Pero diarrea de verdad? Esa suele tener otra causa.
Manténgase alerta si la diarrea persiste o si su bebé parece enfermo.
5. "Tu bebé babea más porque le están saliendo los dientes."
REALIDAD
El aumento de la producción de saliva es un síntoma clásico. Las encías se vuelven más sensibles, lo que estimula las glándulas salivales. Así que no te asustes si tu bebé de repente babea litros y litros. Es algo normal.
Un bonito babero tipo bandana evita que se mojen las ropas y, además, le queda muy bien.
6. "Los dientes siempre salen en el mismo orden."
REALIDAD - normalmente
En la mayoría de los casos, los dientes salen en un orden típico: primero los dos incisivos inferiores, luego los incisivos superiores, seguidos de los laterales y, por último, las muelas. Pero, de nuevo, las variaciones son normales. Mientras la dentición de leche esté completa alrededor de los 2,5 o 3 años, no hay de qué preocuparse.
7. "Existen remedios para aliviar el dolor."
REALIDAD - pero elige con cuidado
Los mordedores, las toallitas frías y los peluches suelen ser de gran ayuda. Nûby ofrece todo tipo de productos para favorecer el desarrollo saludable de los dientes, como divertidos mordedores refrigerantes, desde la aparición del primer diente hasta la dentición completa.
También existen geles o remedios homeopáticos, pero hay que tener cuidado con lo que se utiliza. No todos los geles dentales son adecuados para bebés pequeños. Nunca utilice productos con lidocaína sin consejo médico. Consulte siempre a su farmacéutico o pediatra. Y no, frotar miel, vinagre o un poco de coñac (¡!) en las encías puede que se hiciera en la infancia de la abuela, pero no son en absoluto "remedios milagrosos" recomendables.
8. "Tu bebé tiene menos apetito."
REALIDAD - con un gran "pero"
Cuando le salen los dientes, es posible que tu bebé tenga dificultades para beber o comer temporalmente, ya que las encías están sensibles. Sin embargo, una pérdida prolongada del apetito, en la que tu bebé bebe notablemente menos o incluso pierde peso, no es normal. Esto puede indicar otra dolencia, como una otitis, una faringitis o un virus. Vigila de cerca a tu bebé y busca ayuda médica a tiempo, ya que no es seguro atribuir la pérdida de apetito simplemente a la dentición.
¿Qué puedes hacer si tu bebé tiene molestias por la dentición?
- Masajea suavemente las encías con un dedo limpio.
- Deja que tu bebé muerda un juguete de dentición (enfriado).
- Proporcione consuelo y cercanía adicionales, ya que son días difíciles.
- Si es necesario, administre paracetamol (por prescripción o recomendación del médico) en caso de molestias intensas.
- Mantenga un ritmo de sueño lo más estable posible, aunque las noches sean difíciles.
Por último: ¡esto pasará, de verdad!
La dentición puede ser un momento difícil, tanto para tu bebé como para ti. Pero todas las etapas pasan. Antes de que te des cuenta, tu pequeño te sonreirá con su adorable sonrisa de dientes de leche y ya habrás olvidado casi por completo esas noches sin dormir. Y como siempre: confía en tu instinto. Tú eres quien mejor conoce a tu bebé.
